11 de enero de 2012 | Daniel Solano Sújar
Grandes Centros Docentes
 HABÍA VARIAS FAMILIAS QUE VIVÍAN EN LA  MISMA CASA, LOS NIÑOS ACUDÍAN A SUS ESCUELAS PÚBLICAS

 	
	Tenemos  la  obligación de  recordar  y hablar de nuestras escuelas  públicas, academias, esos centros docentes que  hicieron una  labor  encomiable en la formación de nuestros paisanos en todo nuestra comarca de este espectacular  Alto Valle Del Guadiato, eran tiempos  también difíciles pero aún no había empezado ese éxodo, esa emigración por los cierres continuos  de los núcleos de trabajo de  nuestra zona, corría el año 1957, ya se empezaba a  notar esa desidia, ya había problemas laborales, bueno mi pueblo en esas fechas tenía unos 10.000 habitantes, había varias familias que vivían en la  misma casa, los niños acudían a sus escuelas públicas, las escuelas del grupo escolar, D. Agustín, D. Antonio Usero, D. Federico, D. Pedro Altares, D. Emiliano D. Manuel Murillo., D. Andrés Gutiérrez Ravé, en la  biblioteca, D. Antonio. D. Sebastián, en otros sitios. D. Rafael Santofimia, D. José Beltrán, D. Rafael Torquemada, y nuestras maestras, Doña Rafaela, Doña Amalia, Doña Manolita, Doña María, Doña  Visitación López, Doña  Josefina, Doña Celia, anteriores a estas, hubo una  mujer  muy adelantada a la fecha vivida, por su forma de dar la docencia, Doña María Lagares,, mujer  muy importante para el pueblo de Belmez, tiempos de la república. También hay que recordar a D. Manuel Canalejo, hombre célebre en sus alocuciones y en su forma de trabajar con el alumno.
Hoy traemos a una Academia, que  impartió una enseñanza muy importante, estaba en la calle Coso, ahí Miguel Caro y Enrique pozuelo, fueron unos trabajadores natos en esa comentada enseñanza, tenían a  unos cincuenta  niños, algunos con mas  posibilidades económicas  que otros, algunos visitaban el auxilio social, para comer, como he dicho eran tiempos que empezaba a resquebrajarse la economía social, tanto Miguel Caro, como Enrique  Pozuelo hicieron una  labor extraordinaria e  impagable, muchos niños estuvieron ahí en esa Academia y aprendieron un cultura gracias a su desinteresado esfuerzo gratuito de estos inmejorables belmezanos.
La docencia, es el punto de salida  de la formación de  la  persona, Belmez a lo largo de  su  vida ha tenido a muchos docentes, algunos no están aquí por ignorancia mía, pero todos están en la mente de nuestros paisanos  y amigos, a todo con mucho cariño, les deseo lo mejor y lo mejor es que sigan con esa cariño en su trabajo, y que nunca se canse de  impartir esas materias que hacen que las  personas tengan esos conocimientos importantes  para su desarrollo, gracias Jesús Murillo, gracias Cipriano, gracias  José Luís Garrudo, gracias Isabel Pérez, gracias  hermanas Pidal, gracias  Juan Manuel Mogollón y Angelita  Garcia, gracias Antonio Cobos, gracias Dulce, gracias Encarnita Pérez, gracias Angelita Moya,,gracias Maruja Santofimia, gracias Araceli Ropero, gracias  Maria Dolores. y termino dándole  las  gracias  al colegio Presentación de Maria por la  gran labor que hizo durante su apertura en Belmez, a todos y a los que he  omitido les  pido perdón, a todos  muchas  gracias por ese  gran trabajo profesional desarrollado con los jóvenes  belmezanos.